Nueva York es una ciudad que se vive intensamente a ras de suelo, pero que se admira mejor desde lo alto. Con una gran variedad de miradores repartidos por sus cinco distritos, ofrece experiencias panorámicas que cortan la respiración. Algunos son gratuitos, otros requieren entrada, pero todos regalan una perspectiva inolvidable de la Gran Manzana.
Empire State Building: un clásico que nunca falla
Entre los más emblemáticos se encuentra el Empire State Building. Subir al piso 86 o al 102 (desde 44 USD) permite disfrutar de una vista panorámica de 360° sobre Manhattan. Es un clásico imperdible, especialmente al anochecer, cuando las luces de la ciudad se encienden.
The Edge: adrenalina y vistas de vértigo
Otro imprescindible es The Edge, en Hudson Yards. Su plataforma triangular al aire libre, ubicada en el piso 100, ofrece una experiencia vertiginosa. Para los más aventureros, existe incluso la posibilidad de escalar el exterior del edificio en la experiencia City Climb.
DUMBO: una postal perfecta y gratuita
Para quienes buscan vistas espectaculares sin gastar dinero, el barrio de DUMBO, en Brooklyn, ofrece una postal perfecta del puente de Brooklyn y Manhattan. Es uno de los puntos más fotografiados de la ciudad, y completamente gratuito.
Brooklyn Heights Promenade: serenidad con vistas
Finalmente, el Brooklyn Heights Promenade combina tranquilidad y vistas espectaculares del Bajo Manhattan. Este paseo peatonal, ideal para cualquier momento del día, permite apreciar el skyline neoyorquino con el East River en primer plano.
Explorar Nueva York desde sus miradores es una experiencia visual inolvidable. Ya sea desde las alturas de sus rascacielos o desde sus miradores urbanos, la ciudad siempre sorprende desde otra perspectiva.